Parece mentira que una canción que tiene más de cuarenta
años como es Boys Don’t Cry, primer éxito del grupo The Cure (su segundo
single publicado después del polémico Killing an Arab), pueda conectar de
manera tan fuerte con un adolescente de quince años. No deja de sorprenderme
que la música tenga esta capacidad comunicadora. Una canción que sin duda no
tuvo tanto éxito en su momento, allá por 1979 como lo tiene en la actualidad,
con más de 400 millones de reproducciones.
Pues esto es lo que consiguen todavía en 2022 The Cure.
Trascender a su generación. Ayer en el concierto que dieron en el Palau Sant Jordi,
lleno con cerca de 18000 personas, fui consciente de esta hazaña que es reunir
a personas de todas las generaciones, desde adolescentes como mi hijo Adrián que
acaba de cumplir los 15 hasta personas que andan por la edad de jubilación, unos
con el espíritu “dark” del grupo de siempre, otros con la curiosidad de ver a
un grupo tan grande en directo, los más, nosotros, los auténticos fans de toda
la vida, con la expectativa de escuchar las nuevas canciones tan anunciadas
meses atrás con la promesa de la publicación de un nuevo disco que era la “excusa”
para esta gira y por encima de todos nosotros el espíritu nihilista del
disfrute musical y de la pasión por la música.
The Cure no defraudaron. Seis años después de tocar
en Barcelona, y una vez olvidadas pandemias y demás catástrofes terrunas, el
grupo ofreció un concierto de casi tres horas con veintiocho canciones, después
de la sorpresa para mí que fue escuchar a The twilight sad, una
banda que sonó muy compacta y que definitivamente será mi nuevo descubrimiento
musical del mes de diciembre.
28 canciones que compilaron lo más pop y exitoso del
mainstream comercial con lo más auténtico que nos gusta a los fans, las
canciones largas, como From the Edge of the Deep green sea o Disintegration, y
también una de las nuevas, Endsong, de casi 14 minutos. Los tempos medios y
lentos con oscura melodía, tan típico de una época. Y el foco especial en
alguno de sus discos, algo que hacen en cada concierto. En el de Barcelona fue
sobre todo Disintegration, el álbum de mayor éxito, por lo que he podido ver en
Madrid fue Faith. Tuve suerte, tocaron dos de mis favoritas: Prayers for Rain y
Plainsong
Un concierto que para mí tuvo un significado muy especial
porque acudí con mis dos hijos, Izan de 17 y Adrián de 15, que se sabían
bastantes canciones y que tienen a The Cure en su playlist habitual de Spotify.
Casi se me saltaban las lágrimas cuando The Cure tocaba una canción que ellos
no habían escuchado, pero para mí era un clásico y entonces los dos me hacían
el símbolo del pulgar hacia arriba diciéndome Top, Top.
Ellos disfrutaron, saltaron, cantaron y corearon al grupo.
Yo, hice lo mismo por partida doble, por cada uno de ellos, por compartir este
tiempo con ellos, por disfrutar de mi grupo favorito, que cambió mi vida allá
por 1987 (Mi hijo Izan me dijo que su canción favorita es Why Can’t I be you, canción
con la que yo los descubrí en un momento en que andaba buscando algo sin saber
qué era y cuando vi a Robert en televisión supe que era eso)
Robert está en forma. Su voz sigue siendo su voz, limpia y
poderosa. Su carisma intacto. La banda soberbia. Sus poses y su predisposición
en el escenario total (me quedo con el batería que me parece de otra galaxia) y
el sonido más compacto y elaborado que nunca. Se nota el refuerzo de un
guitarra más en directo.
Todo estuvo medido y contrapesado para ofrecer un conciertazo
que recordaremos durante mucho tiempo, al menos hasta que se publique Songs of
a lost world, el anunciado y muy esperado nuevo disco de The Cure, del que ya
hemos podido disfrutar y escuchar 5 nuevas canciones.
(Robo el Set list de Ivan Valls y la página Hispacure con su
permiso)
1.- Alone
(nueva) 2.- Pictures of
you 3.- A night like this 4.- Lovesong 5.- And nothing is forever (nueva) 6.- Burn 7.- At night 8.- A strange day 9.- Shake dog shake 10.- Push 11.- Play for today 12.- A forest 13.- Trust 14.- A fragile thing (nueva) 15.- From the edge of the deep green
sea 16.- End song (nueva)
Bis 1
17.- I can never say goodbye (nueva) 18.- Plainsong 19.- Prayers for rain 20.- Disintegration
Bis 2
21.- Lullaby
(en la intro Robert canta The blood a capella) 22.- The walk 23.- Friday I’m in love 24.- Doing the Unstuck 25.- Close to me 26.- In between days 27.- Just like heaven 28.- Boys don’t cry