viernes, 29 de septiembre de 2017

CATALUNYA

Siempre que dos posiciones enfrentadas se ponen a discutir, me pregunto qué parte de cada una está dispuesta a cambiar para llegar a un entendimiento. Es decir, qué porcentaje de aquello que hasta hace un momento cada parte consideraba imprescindible en el pensamiento y la defensa de sus ideas, está dispuesto a que deje de serlo para aceptar algo que la otra parte le está intentando argumentar.
¿Qué sucede en ese momento? En el instante en que la mente de una de las partes decide desbloquear su posición inamovible. Sin duda, se trata de un acto de valoración del coste/beneficio, es decir qué puede conseguir en aras de sacrificar una parte de lo que para él hasta hace un momento era insacrificable.
Evidentemente, lo más difícil es que suceda ese “click” (robo este palabro de mi gran amigo Benet), porque en mi opinión, una vez acontecido, el poder de la palabra se impone siempre y en corto o largo plazo de diálogo se suele consensuar un punto final.
El problema que yo creo que hay en Catalunya es que no se ha dado ese “click” en ninguna de las dos partes enfrentadas. Algo que todo el mundo puede apreciar, que muchos pensadores, influencers, tertulianos y creadores de tendencia periodística parecen indicar a cada una de las partes que sustentan repetidamente, pero que éstas no quieren escuchar.
Así pues, estamos ante un intento de mezclar agua y aceite, acto claramente imposible que necesita de un buen emulgente para mixturarlos.
¿Quién podría ser ese emulgente en el caso que nos ocupa?
Ambas posiciones parecen tener razones suficientes (para ellos mismos) para defender lo que defienden. El gobierno español, impidiendo la celebración de un referéndum sin garantías constitucionales y que se salta la norma básica de la convivencia en España. El gobierno catalán, promoviendo un referéndum en aras de un derecho de autodeterminación y una supuesta democracia y deseo del “pueblo catalán”, que ellos insisten en defender por encima de cualquiera.
Pero a estas alturas, después de uno ya celebrado y declarado ilegal, diadas con manifestaciones multitudinarias en la calle, numerosos casos de corrupción del gobierno catalán que ahora promueve esta iniciativa, celebración de elecciones autonómicas que no resultaron ser tan rotundas como los independentistas anhelaban, inhabilitación de Artur Mas, y auge de los nuevos partidos, como el de Ada Colau, supongo que todos entienden que la cosa es mucho más complicada que los dos argumentos sencillos y de base que antes he expuesto.
Ni diciendo que es ilegal se va a terminar con el sentimiento y el deseo de independencia de una parte de los catalanes, ni actuando por la fuerza fuera de la legalidad se va a dar una base legal a ese sentimiento legítimo.
Pero es que todo este proceso no puede analizarse sin tener en cuenta una serie de hechos muy graves, por no decir en ocasiones inverosímiles acaecidos en Catalunya en los últimos tiempos, como el caso del 3 %, la fortuna de la familia Pujol, todavía en libertad por cierto, el caso del Palau, y tantos otros casos de corrupción que, igual que en el resto de España, han ensuciado la vida en Catalunya. Todos los millones robados por los dirigentes catalanes a sus propios catalanes, no deberían caer en el olvido, cuando uno de los argumentos facilones que se utilizan en la calle es que España les roba. ¿Qué opina un independentista de pro sobre los casos que he mencionado anteriormente? ¿Cómo es posible que el pueblo catalán haya votado en masa a una panda de corruptos como fue la cúpula de Convergencia (presuntamente todo claro) y bajo el epígrafe de "luchemos por la independencia" hagamos "pelillos a la mar"?
Más fuerte aún, cómo es posible que Esquerra Republicana, que fue quien destapó el caso del 3 % haya formado un partido con ellos? Oriol Junqueras se ha olvidado de todo lo que Convergencia presuntamente robó supongo... debe tener mala memoria.
Pero más allá de todos los casos de corrupción, para mí el gran interrogante es: La independencia de Catalunya y su constitución como República... ¿para qué? Quiero decir, es realmente sólo un tema identitario, de decir soy catalán y no quiero ser español o qué es? ¿Qué es lo que realmente un independentista aspira a conseguir? ¿Por qué supone que viviendo en una Catalunya independiente va a tener algo mucho mejor de lo que tiene ahora? ¿Qué parámetros compara? ¿Qué datos y quién se los ha dado y sacado de dónde para compararlos? Imaginemos, en un futuro hipotético que todos aceptásemos (incluido Rajoy, sí, ya sé que es mucho suponer pero vamos a hacerlo) que Catalunya tiene derecho a hacer el referéndum, y que todo el pueblo catalán va y vota e imaginemos que el resultado es NO. ¿Qué pasaría entonces? Todo lo que se ha hablado durante meses, la repetición de elecciones, las diadas masivas, el Sí, por doquier etc ¿se iba a terminar sin más? ¿O es que se está planteando un auto proclamado sí - referéndum?
Creo también que si vamos a separarnos, previamente habrá que hacer una redistribución con carácter retroactivo de lo que no se ha invertido en otras regiones "pobres" por haberlo invertido en Catalunya (y en este sentido me refiero a Aragón). Para mí el modelo de "solidaridad" regional es fundamental para asegurar el crecimiento conjunto y es, desde luego, el modelo que sigue la Unión Europea, de cuyos fondos estructurales se ha beneficiado durante décadas España al estar su renta per cápita por debajo de la media. Así que no entiendo que ahora Catalunya no esté de acuerdo con este modelo cuando se ha beneficiado del mismo aplicado desde la Unión Europea.
He escuchado en los últimos días opiniones de gente de todo tipo que no se planteaba votar en absoluto y mucho menos defender la independencia de Catalunya, pero ahora, con todo lo que se ha montado y la posición tan estática del gobierno y tal, pues dicen que claro, que van a ir a votar por la independencia. ¿Es esa una opinión fundamentada en algo?¿O es una rabieta de patio? ¿Cuál va ser el censo que se va a utilizar? ¿Van a votar las personas que tienen 16-17 años como ocurrió hace un año? ¿Quién verificará que no hay irregularidades en las urnas? ¿Cómo se contabilizarán los votos? ¿Realmente alguien con opinión fundada y razonada podrá ir a votar con una papeleta que se tiene que imprimir en su casa?
Por si no hubiera quedado claro quiero decir que mi posición es la de no permitir que se haga ESTE referéndum y en cualquier caso, si se llegase a hacer bajo unas condiciones mínimas de legalidad, mi posición de voto sería un NO.

Soy aragonés, vivo en Castellón, trabajo en Barcelona y viajo por todo el mundo desde hace veinte años. Hablo castellano, inglés, francés, un poco de alemán y un poc de catalá y no me siento de ningún territorio y de todos a la vez. Mi patria es la gente a la que quiero allá donde esté. Quizá por eso no comprendo todo este embrollo.

martes, 26 de septiembre de 2017

La escalera del gallinero - mi crónica de lectura

Tras terminar esta novela de Juan Carlos Núñez Mateo, me vienen inmediatamente dos ideas a la cabeza, quiero decir, sin pensar demasiado: La primera es lo bien que escribe, la estructura de su narrativa, la evolución de las tramas en paralelo, la descripción de los escenarios que te parece tocarlos y hasta olerlos. La segunda es ¿por qué ese título? Y es que yo el “dicho popular” que figura en la contraportada nunca lo había escuchado.

Mi primer “contacto” con esta novela fue por motivos muy diferentes a los que esta crónica me lleva. Andaba yo en la tarea de buscar editorial para la mía propia, ¿Cómo pudiste hacerme esto a mí? (que finalmente publiqué con Editorial Nazarí)


cuando Carlos Tosca (editor de La Pajarita roja), después de darme su elegante (y razonada) negativa me contó que acababa de recibir una novela que, habiendo sido rechazada en una ocasión anterior, su autor la había trabajado tan bien, que estaba “casi” para editarla tal cual. Aquella era esta que nos ocupa. Así que desde que supe que se había publicado, la tuve en mi lista de pendientes. Ahora ya la he leído y puedo hacer mi crónica de lectura.

Como decía al principio, lo primero que me ha llamado la atención es la buena factura de la prosa de Juan Carlos. No hay en ningún momento ningún atisbo de duda sobre cómo ha querido atacar cada tema, cada recoveco de la trama o de cada personaje. Parece maduro, con las ideas claras de lo que quiere decir y por qué y una vez te sumerges en la trama y acompañas a Valerio, te integras en la sociedad del pueblo al que acude. Pero consigue introducirte tan bien que sonríes cuando lees los pasajes de Siete, o te excitas en los episodios carnales con la cartera y sientes el calorcito cuando el protagonista se sienta en el banco al sol a cotillear con los otros del pueblo. Es misteriosa la trama paralela que sucede años atrás y creo que bien entrelazada. En mi opinión enriquece el viaje existencial que el protagonista decide llevar a cabo para reiniciar su vida.

El escenario donde todo sucede es esencial, tan bien descrito, tan realista que se puede palpar. Yo diría que la novela se vive gracias al escenario.


Pero llega el final, y con él unas cuantas preguntas sin respuesta, entre las que para mí, la fundamental sería. ¿Qué le sucede a Valerio?

viernes, 22 de septiembre de 2017

ESCRITORES SINGULARES-20: JUANA AUCEJO


Juana Aucejo es una ESCRITORA SINGULAR. En sus relatos, que he podido disfrutar en el curso de escritura online Sanscliché impartido por Rosario Raro, nos deleita con la frescura de sus historias cortas, o con la magia de los cuentos que su imaginación crea, como el que publicamos tras su entrevista, con la ternura de las historias más amorosas o la vertiginosidad de las tramas más actuales y cotidianas. Todos los géneros son bien tratados por la prosa de Juana que no escatima en generosidad adjetiva, complementariedades de lugar y tiempo para enriquecer sus frases construidas con genuina simplicidad y perfección.

Es, en definitiva, la prosa que todos queremos leer, a la que apetece dedicar tu tiempo libre, ese que tanto valor tiene, la escritura que tan bien nos hace sentir, en momentos tranquilos de cotidianidad casera.

Juana ha sido una participante fiel del taller, que nunca ha fallado en su creación semanal y con la que he compartido muchas veces dossier, a veces solo nosotros dos. Eso la hace para mí muy especial.

Tiene unos cuantos relatos publicados en antologías y libros colectivos que os recomiendo a todos. En especial, el relato que a continuación comparto, lectores, un cuento precioso, entrañable y cómo no, metafórico que nos puede transportar al mundo de los sueños, a demostrarnos que todo aquello que queremos conseguir, podemos conseguirlo si nos lo proponemos con suficiente tesón.
Por favor, leedlo, es conmovedor.

Y para que conozcáis un poquito más a su autora, una breve entrevista a continuación.

AZULES

El pajarillo, al que la pequeña intentaba tranquilizar arrullándolo, revoloteaba inquieto en la jaula sobre sus rodillas buscando una salida.

Era una apacible tarde tinerfeña, en la que el color azul del cielo, que aún no había empezado a tomar los colores dorados del atardecer, se confundía en el horizonte con el del mar y llegaban ráfagas perfumadas de la exuberante vegetación del valle de Masca, donde los Montes de Teno.

Hace muchos, muchos años –escuchó la voz de su abuela que se había sentado cerca de ella y adivinando el principio de una de sus historias, se acurrucó a sus pies– un pececillo recién nacido, casi un alevín, nadó y nadó atraído por la brillante luz que veía encima de él. Cuando por fin consiguió llegar hasta ella se asustó al sacar la cabeza fuera del agua y más cuando a lo lejos vio a nuestro Padre Teide, tan grande y casi azul como el cielo.

Una fuerza irresistible le hizo nadar hacía él pero al llegar a la orilla descubrió que no podía ir sobre la arena ni respirar fuera del agua. Lo siguió intentando de forma incansable dando brincos, cayendo sobre la arena de la que era rescatado una y otra vez por las olas. Desde lo alto, el Teide, enternecido, sintió compasión de él y poco a poco fue transformándolo. Sus escamas se hicieron más duras, su cola se alargó y pudo caminar y respirar fuera del agua. Se había convertido en un lagarto. Feliz, reptó hacía el volcán atravesando bosques y barrancos, trepando escarpadas montañas, siempre con la vista puesta en el gigante que tanto le atraía y que cambiaba de color, algunas veces era azul, otras gris o estaba cubierto con un manto blanco que le obligaba a él a esconderse debajo de las piedras para guarecerse del frío y continuar cuando se lo quitaba. Así llegó a sus pies y comenzó a subir la ladera. Según subía, la tierra se volvía más oscura y el verde de las plantas desaparecía. Estaba ya muy alto y había pasado mucho tiempo desde que salió del mar. Se paró y miró hacia la playa donde comenzó su viaje. Qué hermoso se veía todo allá abajo. Sintió una punzada de nostalgia. Estaba cansado para subir más y no tenía fuerzas para deshacer el camino, además, no podía volver a vivir en el mar, ya no era un pez. Nuevamente el Padre Teide se compadeció de él y sus escamas se convirtieron en plumas y sus antiguas aletas en alas y pudo volar para bajar hasta el mar y subir a lo más alto de los  pinos; él es nuestro pinzón azul.
   

La niña miró en silencio la sonriente cara de la abuela antes de bajar la mirada hacia la jaula donde se debatía el pájaro y abrirle la portezuela. Una saeta azul salió disparada hacia lo alto. 

ENTREVISTA SINGULAR

1.- Si te dieran la posibilidad de publicar una novela con una gran editorial ¿sobre qué tema te gustaría escribirla? Por cierto, ¿te vas a lanzar a la aventura de publicar relatos o novela? ¿Tienes algún proyecto en mente?
Gran, mediana o pequeña editorial, con que cuide lo que publique es más que suficiente para mí. Me siento muy cómoda escribiendo relatos que publico en mi blog o son seleccionados para antologías de concursos en los que  participo. Tal vez en un futuro, pero antes, sí, tengo un proyecto: la publicación de la obra que como albacea me legó mi querido amigo y compañero Daniel Astur Vega cuyo blog http://danielvega-danielasturvega.blogspot.com.es administro.   

2.- Imagino que como buena escritora que eres serás también una gran lectora, ¿en qué momento del día te gusta más leer?
Por la noche, pero gracias al libro electrónico y su facilidad de transporte aprovecho cualquier tiempo muerto como trayectos, esperas o de descanso al aire libre.  

3.- He podido disfrutar de la gran originalidad de tus relatos en varias ediciones del taller de escritura online Sanscliché impartido por Rosario Raro. Cuando escribes, ¿qué temas o situaciones te inspiran? O sea, ¿Cómo te enfrentas al folio en blanco?
Con mucho respeto y temor a que no surja la idea que suele nacer de distintas experiencias.  

4.- ¿Qué te acompaña cuando lees? ¿Y cuando escribes?
Siempre el silencio, si no, me abstraigo de tal manera que no escucho nada.

5.- Hoy en día el número de publicaciones es enorme. Hay tal marasmo de novelas, libros de escritores noveles y ediciones clásicas que es muy difícil filtrar y decidir qué es lo que leemos. En tu caso, ¿qué es lo primero en lo que te fijas para decidir leer un libro?
En el  título y la portada. Si me atrapan, en la sinopsis.

6.- Vivimos en el mundo de la hiperconexión. ¿Utilizas las redes sociales? Cuáles son las que te parecen más interesantes y por qué.
Facebook y Twitter. En ellas encuentro los contactos y las noticias que más me interesan. 

7.- ¿Eres escritora de día o de noche?
Soy escritora del alba, cuando las brumas de los sueños aún están en mi  mente.

8.- Aparte de la literatura, ¿qué otras artes te gustan? Cuéntanos un poquito cuáles y por qué (si es que hay un porqué).
El cine y el teatro porque alimentan mi fantasía y junto con la música me transportan a otros mundos. 

9.- Te pido ahora unas respuestas rápidas

a) ¿Nos recomiendas un libro?
 “La muerte de una heroína roja”, de Qiu Xiaolong y  “Todo bajo el cielo”, de Matilde Asensi,  para conocer un poco al gigante asiático.

b) Un personaje literario que sea inspirador para ti.
La protagonista de “La isla de las tormentas”, de Ken Follet, por su fuerza y determinación.

c) ¿Qué género literario te apasiona más?
El thriller, intriga y la novela histórica.

d) ¿Eres de radio o de televisión?
De radio.

e) ¿Mar o montaña?  
Ambos lugares me gustan, pero soy de mar.

f) La última cosa que te haya sorprendido tanto que todavía la recuerdes.
¿La última? Esta entrevista. Ha sido una grata sorpresa que quedará en mi despensa emocional.

g) Una canción o cantante que tenga para ti un significado singular.
“Mediterráneo”, de Serrat, porque también yo crecí jugando en la arena  de la playa del Cabanyal en Valencia y “Jinetes en la tormenta” , de Jim Morrison, que me conmueve desde la primera vez que la escuché.

10.- Para terminar, me gustaría que definieras una escena lo más cercana posible a tu felicidad.
Celebrar con las personas queridas la finalización con éxito de algún proyecto. 

martes, 19 de septiembre de 2017

FANGORIA - Mi crónica del concierto en Peñíscola

Acudir a un concierto de Fangoria es siempre una delicia personal, pero cuando se hace con la compañía de buenos amigos y, en especial, con la de mi mujer y mis dos hijos de 9 y 11 años, la experiencia se convierte en inolvidable.
El concierto se celebró en la carpa de fiestas de Peñíscola, un recinto mediano en el que sin embargo no tuvimos en ningún momento sensación de agobio. Aunque la geometría de la carpa no invitaba a reproducir un sonido perfecto, estuvo bastante acertado, algo que me sorprendió.

Comenzó Fangoria con un clásico de Dinarama, El Rey del glam, pasado por el tamiz electrónico de 2017 seguido de El cementerio de mis sueños, para mí la canción más redonda del disco El extraño viaje, con el que Izan (en el momento de su publicación tenía 2 años) descubrió a Alaska y a Fangoria. El trío del comienzo terminó con Ni tú ni nadie, con el que el público se vino arriba, signo inequívoco de la década predominante en la que vivíamos muchos de los presentes, como queda también reflejada en mi primera novela titulada ¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?


Tras este trallazo guitarrero del comienzo continuaron con canciones de sus últimos discos, Canciones para Robots románticos, y Cuatricromía, como Iluminados, que Adrián (mi hijo de nueve años) se sabía de memoria, Desfachatez, una de las más aburridas en mi opinión, Más es más, que para mí es un canto al exceso, Manual de decoración para personas abandonadas que no perdió su encanto y preciosismo con la puesta en directo y Disco Sally con variaciones de electrónica-máquina muy convenientes para perder los papeles bailando, como si estuviésemos en un after-hours.

Siguió el concierto con la parte más elaborada y en mi opinión más creativa, encadenando verdaderas joyas compuestas por Nacho y Alaska: Espectacular fue tal cual su título, una explosión de luminosidad y melodía que la pareja combina tan bien con los ruidos y las bases rítmicas. La siguieron Perlas ensangrentadas, revisitada para el momento actual y con una carpa a punto de explosionar por la magnitud de una canción tan potente y que se ha mantenido durante tantos años. Absolutamente comenzó con un recitado de Sara Montiel que nos dejó boquiabiertos y una puesta en escena elegante, barroca y preciosista. Explosionó después Geometría polisentimental, himno transgeneracional que coreamos toda la familia, mi mujer Laura y mis dos hijos que se la sabían de principio a fin. También nos encantó la siguiente, Dramas y comedias. Izan esperando el momento de la coreografía que los bailarines representan en el video clip. Su musicalidad y melodía es positivista a tope.

El trío final enlazó con el trío del comienzo en mi opinión: No sé qué me das despertó al público y levantó sus brazos en un viaje mediático que arrasó con A quién le importa, coreada por las miles de personas presentes en la carpa a volumen brutal. El momento de excelsa adrenalina terminó con Fiesta en el infierno, en mi opinión mejorada hasta lo sublime en su versión en directo.

Todos queríamos más, por supuesto y tras unos minutos reaparecieron Rafa Spunky, Baby Horror, Nacho Canut y Alaska para interpretar la canción que vehicula la película Cuernos de espuma, de Manuel Toledano y con la que Alaska se emocionó en uno de sus últimos cumpleaños interpretada por Asier Etxeandía, ¿Por qué a mí me cuesta tanto?, profunda, sentimental, lánguida y electrizante.
Pero el pre-final tenía que estar a la altura de un concierto como el que dieron y el aluvión final no tuvo descanso, con todas las canciones unidas que hablan de bailar que dejaron al público extasiado.

La sorpresa final fue mucho más que una sorpresa, cuando Alaska invitó al escenario a la Nancy Anoréxica (alter ego de Mario Vaquerizo) para interpretar un tema-remix-mezcla-versión que comenzó con la pecular visión de Nacho Canut  de Hey boy, hey girl, de los Chemical brothers muy bien traída en su mezcla hacia el clásico Y.M.C.A. y versionada en castellano que literalmente creó una implosión sonora en la que el público se entregó a los pies de la estirpe Fangoria y sus acólitos.
Sí, eché de menos más temas de la primera etapa de Fangoria, de la trilogía Un día cualquiera en Vulcano, algún single de los discos más comerciales intermedios de Fangoria y quizá hasta alguna canción “rara” de Dinarama que en el renacer de Fangoria a final de los 90 solían añadir en los directos.

La última vez que estuve en uno de sus conciertos fue en el Sónar en el que actuaron durante la gira posterior a la publicación de El extraño viaje y el listón lo dejaron muy alto pues en aquella ocasión ofrecieron una primera parte con un cuarteto de cuerda, todos vestidos de blanco, fusionado con la electrónica que es imposible olvidar.


Sin embargo, y aun a pesar del hándicap de aquel fantástico precedente, fue una noche para recordar, para rememorar años después, cuando mis hijos hayan crecido y quizá vayan a su primer concierto con sus propios hijos, y estoy feliz porque sé que éste, el primer concierto al que ellos acudieron en su vida, lo recordarán siempre con cariño y devoción. Larga vida y prosperidad-------






domingo, 17 de septiembre de 2017

¿Por qué Damasco? - mi crónica de lectura

Siempre que cae por mis manos cualquier libro o crónica de Damasco me lanzo a ellos con entusiasmo, porque la capital siria ha sido uno de los lugares más evocadores que he visitado en muchas ocasiones. Lamentablemente, he tenido que hacer la anterior consideración en pasado, ya que todo lo que Damasco ofrecía al visitante ha pasado a ser historia y me temo que tendrán que pasar muchas décadas hasta que podamos volver a ver (si es que algún día se puede) el esplendor que tuvo hace ya casi una década.

El libro de Tomás Alcoverro está planteado como relatos cronológicos de un corresponsal de la zona que va narrando las peculiaridades, las esencias de los acontecimientos que sucedían en Siria desde sus primeras visitas a principios de los 70.

Su distribución en capítulo-relatos de 3-4 páginas anima a una lectura rápida, entretenida, que te deja con ganas de más y que aleja la pereza de la lectura en aquellos que no tengan su hábito muy asentado.
Lujosamente prologado por el exministro de asuntos exteriores Miguel Ángel Moratinos, Tomás nos lleva de la mano hacia la espiral de destrucción y desolación a la que la mal llamada primavera árabe arrastró al país de oriente medio.

Da un placer (y a la vez un gran dolor) recorrer con el texto de Tomás las calles del barrio cristiano al que se accede una vez franqueada Bab Touma, el antiguo mercado damasceno de Hamidiye, la Gran Mezquita de Damasco (donde descansan restos de San Juan Bautista) o el intrincado callejero alrededor de ellos así como enclaves llenos de historia y energía imborrable, como Maalula (uno de los últimos lugares de la tierra donde todavía se habla Arameo, el idioma de Jesús) o Palmira.

Leyendo el libro de Tomás, he recordado tantas cenas en los restaurantes de la montaña Ben Jabal, desde los que se veía Damasco de noche, imponente, llena de minaretes iluminados con luces verdes y sobre todo llena de paz y de seguridad. También los viajes a los polígonos industriales de los alrededores de Damasco, a Yarmouk Camp, el barrio palestino donde disfruté en veladas inolvidables y sobremesas con mis amigos Abdel Karim y Fadia. Recuerdo tantas noches pasadas en el Hotel Cham Palace, los paseos por las calles que lo circundaban, donde se podían comprar CD’s musicales a bajo precio, degustar la rica gastronomía siria, ver a sus gentes, los mercadillos de fruta y verdura o simplemente sentarme a leer un libro en cualquiera de sus parques.


También en muchas ocasiones conduje por la carretera que conduce a Beirut, me detuve en el paso fronterizo que tan rápido se hacía para un europeo y tan lento para un turco (mi acompañante, Attila, de cuya mano descubrí este magnífico país y de quien tanto aprendí).

Tomás nos relata también su experiencia en Beirut, nos habla de su esplendor, de su libertad en un marasmo de limitaciones geográficas, de su desgraciada guerra y de su renacimiento (momento en el que yo la descubrí). 

No tuve ocasión de visitar en tantas ocasiones Beirut como lo hice con Damasco, pero las contadas ocasiones que deambulé por sus calles me enamoró. Hace un tiempo escribí un relato titulado Atardecer en Beirut, pronto lo publicaré.

Para todos aquellos que nunca pudieron o quisieron visitar Siria, para todos los que están contagiados de los únicos mensajes que llegan hoy en día de aquella zona, de destrucción, de atentados, de miseria, es éste un libro necesario. Para comprender por qué es tan injusto, tan inhumano y tan cruel que el veneno de la guerra sin sentido siempre, pero en este caso más, en la que nadie sabe muy bien quién lucha contra quién, quién es el bueno, quien es el menos malo y por qué se está destruyendo una cuna de civilizaciones, haya prendido en aquella tierra de paz y de ejemplo de convivencia entre distintas religiones, hoy en día destruida por completo.

Rezo al Dios en el que no creo para que un día todo termine y podamos volver a caminar por las calles de la vieja Damasco, con calma, con tiempo para mirar a los ojos a sus viandantes, y con la serenidad para respirar el aire de su historia.






miércoles, 13 de septiembre de 2017

ESCRITORES SINGULARES-19: JAVIER GARCÍA

Javier García es un ESCRITOR SINGULAR. Lo descubrí con su libro de relatos Historias desde la almohada al que seguí con su novela SIROCO, que tanto me gustó, la forma en que abordó el tema y la resolución de la trama. Ya le he preguntado (y creo que no he sido el único) para cuándo podremos leer un nuevo caso del detective Jorge Alarma. Muchos lectores esperamos que sea pronto.

Lo primero que sorprende en Javier es cuán prolífica es su producción literaria. Novelas, relatos, publicaciones online para jóvenes, su participación en ferias, presentaciones, su hiperactivo blog y su frecuente presencia en redes sociales. Parece que el día no tenga horas suficientes para tanta aportación y, sin embargo, Javier puede con todo ello (y yo creo que con más que se pusiera).

Aunque yo destacaría su narrativa relacionada con los temas sociales, eje central de SIROCO, la lectura de todo lo que escribe es tan variada que Javier tiene que gustar a todo el mundo, pues seguro que ha escrito un relato sobre un tema que a cualquiera de nosotros nos interesará.

También es miembro fundador de la asociación literaria Tirant lo Groc, que agrupa a varios escritores de Villareal, y que nació con el impulso de ser un punto de encuentro donde se puedan “difundir ideas, organizar eventos e impulsar proyectos que sean interesantes; escribir para ser leídos, crear cultura” y así “poner en valor la literatura local.

Su última novela, Crimen en la mansión Holden ha sido un éxito con el que ha recorrido la geografía española.

 A continuación comparto con todos vosotros, lectores, un relato sorprendente, evocador, que nos invita a creer, a pensar en qué viviremos cuando terminemos nuestra existencia terrenal y cómo no, lo ha ejecutado con maestría, con la sutileza de las palabras que ofrecen sentimientos construidos de sensaciones, con delicadeza y rebosante de buena energía.

Leedlo, merece la pena. Y para que conozcáis un poquito más a su autor, una breve entrevista a continuación.


¡SHHH!

Todo ocurrió en una de esas temporadas en las que crees que alguien te ha echado mal de ojo. Nada me salía bien. Me despidieron del trabajo, mi mujer me dejó por otro hombre, y para colmo de los males, mi madre cayó muy enferma por culpa de un cáncer de pulmón. Todo un puñetero pack gratuito de desgracias.
Al poco tiempo de enterarnos de la enfermedad de mi madre, la ingresaron de urgencia en el Hospital Provincial de Castellón, para tratar el temido tumor que se le había propagado por todo el cuerpo. Las palabras del Dr. Quijano, el responsable de oncología del centro, no fueron muy esperanzadoras. Cada uno de los mensajes pesimistas que salían por su boca,  se convertían en auténticos escupitajos cargados de dolor e impotencia disparados a bocajarro contra mi corazón.
Toda esa tragedia ocurrió en el verano más bochornoso que jamás he vivido.  Recuerdo a mamá abanicándose, a pesar de su estado, luciendo en su cara esa simpatía andaluza que corría por sus venas: «Coge dinero de mi monedero y ve a tomarte algo fresco, Manuel», me dijo una noche al verme sofocado frente al cristal de la ventana, con los botones de la camisa despasados por culpa del sudor y la mirada perdida en la calle, pensando en la miserable vida que me había tocado vivir. Lo hubiera dado todo por cambiarme con ella. No se merecía esa cruel enfermedad que se la estaba llevando a marcha forzada.
Le hice caso, pero no cogí el dinero de su bolso.  Me acerqué hasta ella y le di un beso en la frente: «Ahora vuelvo enseguida, mamá», le dije muy despacio para que pudiera conciliar el sueño. Antes de salir por la puerta volvió a llamarme.
—¡Manuel!
Me giré para verla y noté en su cara la expresión más tierna que jamás le  había visto.
—Dime, mamá.
—¡Te quiero, hijo! —me dijo sonriendo, con sus ojos convertidos en dos luceros brillantes.
Le respondí con mi mejor sonrisa, esa que suele dar las gracias sin decir ni una palabra. Cerré la puerta despacio y salí a buscar un refresco.
Lo recuerdo a la perfección, eran casi las once de la noche cuando me dirigía por el pasillo del hospital hacia una de las máquinas expendedoras de bebida. Me topé con un par de enfermeras que caminaban despacio, mucho más lento de lo normal. Pero eso no fue lo que me extrañó de ellas, sino que lo hacían sin dirigirse la palabra, en una sepulcral procesión. Sus piernas se movían al compás del segundero que pendía sobre la puerta de la salida: «tic, tac, tic, tac», pude escuchar el movimiento de las agujas. Cuando pasé por su lado las saludé, pero ellas no respondieron. Ni siquiera me miraron, tan sólo siguieron con la vista puesta en el frente, intentando llegar a su destino sin que nada ni nadie las entretuviera. Su indumentaria también me resultó curiosa, pues era la primera vez que veía a dos enfermeras lucir una especie de gorrito en la cabeza con una cruz roja dibujada, algo muy vetusto y extraño.
No le di más importancia, me senté en uno de los bancos del diminuto parque interior de la clínica. Fumaba un cigarro a la vez que daba pequeños sorbos a lata de refresco de cola que me compré. Entre calada y trago empecé a martirizarme por toda mi situación personal. Intenté convencerme de que yo no era el responsable de mi mala suerte, pero en realidad no era así; tenía parte de culpa como ser humano que exhalaba vida entre respiro y respiro.
Me sentó bien el refrigerio y apagué con fuerza la diminuta punta del cigarro en un cenicero. Eché de mis pulmones la última calada y decidí regresar.
Antes de llegar a la habitación volví a ver a lo lejos a esas dos enfermeras antipáticas, pero pronto advertí que no iban solas. Una mujer mayor las acompañaba. Iba entre las dos sanitarias, flanqueada por el silencio y la seriedad. No tardé en comprobar que la anciana se trataba de mi madre. Me pareció muy raro que a esa hora la sacaran de su habitación, pues en realidad estaba débil para hacerlo. No pude evitarlo, grité desde la distancia:
 —¡Mamá!
Ella se detuvo. Se dio la vuelta para saludarme y me dijo adiós con la mano. Una de las sanitarias tiró de su brazo para que reanudara la marcha. Luego recibí por parte de esa misma mujer un reproche; puso su dedo índice sobre sus labios y escuché un desagradable siseo: «¡Shhh!», me mandó callar. Después retomaron el paso y se dirigieron hacia el final del pasillo.
Aquello no me pareció normal. Corrí hasta ellas, pero poco antes de darles alcance vi algo que me impactó: mamá y aquellas dos extrañas desaparecieron a través de la pared del fondo.
Volví a correr, pero cuando llegué no pude hacer más que tocar el duro y frío tabique. Allí no había nadie, era imposible que nada pudiera atravesar el muro. No me moví del lugar durante unos minutos. Creí que tal vez había sido una cruel recreación de mi cabeza, pues llevaba demasiado cansancio acumulado.
Le quité importancia y regresé a la habitación. Antes de abrir la puerta sentí un ligero escalofrío recorrer por mi cuerpo. Cuando entré y vi a mi madre yaciendo sobre la cama lo comprendí todo. Su cuerpo ya no respiraba. Su cara pereció con la misma sonrisa que me regaló minutos antes. Cerré sus ojos para abrir el luto en los míos. Mis lágrimas y un último beso que le di en la frente fueron su único equipaje para cruzar al otro lado. No le ganó la jugada al cáncer, pero al fin pudo descansar, se lo merecía.
Desde entonces, cada vez que alguien pide silencio presto atención a todo lo que me rodea. El mutismo huele a muerte y yo intentaré escapar de ella. Aunque cien tuertos me hayan mirado, vivir merece la pena.

ENTREVISTA SINGULAR 

0.- Sé que en tus comienzos como autor editado utilizaste la autoedición. Luego has publicado con varias editoriales. Cuéntanos un poco cómo ha sido tu experiencia en ambos casos. ¿Nos podrías dar un consejo para todos aquellos que deseen publicar por primera vez?
Mi primera publicación fue un libro de poemas, al que titulé “Poemas en un Frasco”. Se trató de una publicación limitada que distribuí entre mi círculo más cercano, por este motivo decidí autopublicarlo. Años después, animado por todo los lectores de mi primer poemario y de mi blog, me aventuré a lanzar mi primer libro de relatos: “Historias desde la almohada”. Desde ese libro hasta mi última novela, “Crimen en la Mansión Holden”, han sido publicaciones que han encontrado editoriales que han apostado por ellas y su comercialización. Autoedición, edición clásica… existen varios tipos de ediciones y cada una de ellas tiene sus ventajas e incovenientes, es un tema que da para un rato de charla. Pero si os interesa un poco más, os dejo un enlace a mi blog en el que lo explico un poco más detallado:
¿Un consejo para publicar?  Paciencia, constancia y mucho cuidado con los “cantos de sirena” de ciertas editoriales.

1.- Eres un autor prolífico que ha publicado ya muchos libros, pero imagina que te dieran la posibilidad de publicar una novela con una gran editorial, de tirada nacional y promoción multimedia ¿sobre qué tema te gustaría escribirla y a qué no renunciarías bajo ningún concepto?
Suelo escribir sobre cualquier género, aunque he descubierto que me encuentro más cómodo escribiendo historias negras y policíacas. Nunca renunciaría a publicar con mi nombre. Sé que es muy común y poco comercial; una vez un editor me sugirió que buscase un seudónimo, pero lo rechacé. Yo soy Javier García Martínez, aquí y en la China.

2.- Imagino que como buen escritor que eres serás también un gran lector, ¿en qué momento del día te gusta más leer?
¡Me encanta leer! Suelo hacerlo a mediodía, después de la comida, y por la noche antes de dormir.

3.- He podido disfrutar de dos de tus libros que recomiendo a todo el mundo, SIROCO y CRIMEN EN LA MANSIÓN HOLDEN.  Cuando escribes, ¿qué temas o situaciones te inspiran? O sea, ¿Cómo te enfrentas al folio en blanco?
Soy bastante metódico al respecto,  no puedo sentarme delante de la pantalla y empezar a teclear sin más, como lo hacen otros escritores. Al folio blanco le presento batalla mediante fichas de personajes, guiones de capítulos y escenas que previamente he detallado en un esquema. Con todo ese papeleo y sabiendo qué va a ocurrir en todo momento, me es más fácil escribir.

4.- ¿Qué te acompaña cuando lees? ¿Y cuando escribes?
A la hora de leer intento que el silencio sea mi compañero, pero en cambio, cuando escribo, suelo encender el Spotify y buscar música suave.

5.- Hoy en día el número de publicaciones es enorme. Hay tal marasmo de novelas, libros de escritores noveles y ediciones clásicas que es muy difícil filtrar y decidir qué es lo que leemos. En tu caso, ¿qué es lo primero en lo que te fijas para decidir leer un libro?
Tengo tres puntos de los que no me salgo a la hora de escoger una lectura:
        1-El género.
       2-La sinopsis.      
       3-Los comentarios o reseñas que haya podido leer.

6.- Vivimos en el mundo de la hiperconexión. ¿Utilizas las redes sociales? Cuáles son las que te parecen más interesantes y por qué.
Las suelo utilizar a diario pues son una buena herramienta para ganar lectores. Por regla general utilizó mucho más Facebook, por su facilidad de manejo frente a Twitter, y este año descubrí Instagram.

7.- ¿Eres escritor de día o de noche?
La noche me susurra mejor.

8.- Aparte de la literatura, ¿qué otras artes te gustan? Cuéntanos un poquito cuáles y por qué (si es que hay un porqué).
Me encanta escuchar música, soy de los que piensa que la vida es una banda sonora, aunque soy un poco torpe para memorizar títulos, y discos. También disfruto con el teatro y el cine.

9.- Te pido ahora unas respuestas rápidas

a) ¿Nos recomiendas un libro?
El último que me acabo de leer, para amantes de lo sucio: 1280 almas, Jim Thompson.

b) Un personaje literario que sea inspirador para ti.
Me quedo con Jorge Alarma, es parte de mí y un tío muy especial.

c) ¿Qué género literario te apasiona más?
La narrativa noir, los thrillers y el terror.

d) ¿Eres de radio o de televisión?
Me cautiva más la radio, sobre todo desde que están de moda los podcast a los que puedes acceder en cualquier momento.

e) ¿Mar o montaña?
Siempre fui de montaña, pero he empezado a descubrir el mar y sus caricia en mis pies, mientras paseo y me reorganizo. Reconozco mi infidelidad.

f) La última cosa que te haya sorprendido tanto que todavía la recuerdes.
El día que me dijeron que iba a ser padre de mellizos. Desde ese momento no ha habido ninguna sorpresa que la haya igualado.

g) Una canción o cantante que tenga para ti un significado singular
Todos los días a las cinco de la mañana, suena Jump (Van Halen) en mi despertador. Desde hace mucho tiempo se convirtió en un ritmo motivador para arrancar el día. Mi mujer no piensa lo mismo.

10.- ¿Podremos disfrutar pronto de una nueva aventura del investigador Jorge Alarma? Creo que muchos lectores, como yo, nos quedamos con ganas de más cuando terminamos el libro.
La verdad es que mucha gente me ha pedido el regreso del peculiar Alarma. Tengo perfilada su próxima historia, aunque no he empezado a escribirla. Estoy en proceso de documentación, elaboración de guiones y trama. Llevará un tiempo, pero saldrá J

11.- Publicas un blog de éxito, www.xavivi.es ¿Nos puedes contar un poco tu experiencia con el mismo?
Sí, tiene seis años de publicaciones, cerca de 150.000 visitas y estoy encantado con él. En el mismo escribo poemas, relatos, reseñas…todo relacionado con el mudo de literatura.

12.- Y para terminar, me gustaría que definieras una escena lo más cercana posible a tu felicidad.

Un libro en blanco y abierto, para escribir en él las aventuras que se abren cada fin de semana con mi mujer y la sonrisa de mis hijos; lo disfruto y lo reconozco, soy feliz así, sin más.

viernes, 8 de septiembre de 2017

DAVID BOWIE is


 inspiring, exciting, surprising… podría continuar con unos cuantos adjetivos más que en cualquier caso serían insuficientes para calificar la espléndida retrospectiva que el Victoria & Albert Museum de Londres ha organizado y expuesto en el Museu del Disseny de Barcelona.

La muestra comienza con el vestido original que Kansai Yamamoto diseñó para la gira de Aladdin Sane en 1973 y que es sencillamente espectacular. Para mí, es el símbolo de lo que David Bowie fue siempre: Sorprendente, innovador, moderno en cualquiera de sus épocas, provocador y normalizador al mismo tiempo y por supuesto, singular.

Creo que necesitamos un nuevo David Bowie, una figura que rompa con lo establecido, que sorprenda a la industria musical, aburrida y mediatizada, que levante expectativas, cree ilusiones entre los jóvenes que buscan un referente de algo inusual y que tenga un poder creativo global, que abarque mucho más que la mera composición musical.

Ayer durante mi visita a la exposición quedé extasiado por la singularidad de cada vestido, de cada detalle imaginado y diseñado para cada disco y gira de David. Si pudiera entrar en una máquina del tiempo y retornar a una época pasada sin duda elegiría volver a uno de sus conciertos de principios de los 70.

La exposición ofrece al visitante una innumerable lista de detalles, informaciones y curiosidades sobre la inabarcable carrera de Bowie. Descubrí por ejemplo que Life on mars? Fue compuesta en un día, que cuando comenzó a finales de los 60 no sabía ni escribir las notas musicales y tuvo que “empollarse” un libro como guía y ayuda. Que vivió con Iggy Pop en Berlín, o que uno de sus libros favoritos de la época fue Adiós a Berlín, de Christopher Isherwood. Que escandalizó a la sociedad británica en el 72 con su aparición en televisión con un mono de tela plastificada naranja y azul, el pelo naranja de punta y botas rojas, o que tantos elementos de sus creaciones fueron censurados, como el vestido “tela de araña” que era una simple tela de araña (hilos) con tres manos que lo “sujetaban” desde detrás, una en cada pecho y otra en sus genitales. Esta tercera mano fue censurada y se quitó pero entonces, la provocación era aún mayor, cosa que se resolvió añadiendo unos leggins dorados.
He escuchado muchas veces a Alaska decir que Bowie cambió su vida y creo que el hecho de que suceda algo así es maravilloso, que se pueda dar con un icono que revuelve la existencia de una persona en su totalidad es algo difícil de conseguir.

DAVID BOWIE is, sin duda es muchas cosas, un referente para muchos jóvenes, inspiración en cualquier momento para todos y un ejemplo más de que lo diferente, lo inusual, lo increíble puede convertirse en exitoso.



Unido a todo ello, y casi lo más importante desde mi punto de vista en el momento actual fue la coherencia y lógica evolución que tuvo David en su carrera. El fantástico The Next Day, penúltimo álbum antes de su muerte, que aparece en mi novela ¿Cómo pudiste hacerme esto a mí? http://editorialnazari.com/es/catalogo/1194

fue su retorno natural después de muchos años sin publicar y Black star el colofón final a una trayectoria intachable.