José Manuel González de la
Cuesta es un ESCRITOR SINGULAR. Termino de
leer su penúltima novela publicada titulada Nunca seremos los mismos
y constato la larga trayectoria y oficio de este prolífico escritor, que aborda
casi todos los géneros: varias novelas publicadas, una nueva autopublicada en
Amazon, de título La televisión de la discordia, artículos de opinión en el
periódico Levante, donde aporta una visión ácida y crítica sobre temas sociales
y de actualidad, relatos para diversos proyectos e iniciativas, entrevistas a personas
de indudable interés cultural y social y un fantástico blog de nombre mágico: La
escritura esférica que os recomiendo seguir y leer.
Es muy interesante descubrir la versatilidad de un escritor como José
Manuel, su compromiso con la defensa y proyección de la literatura en general y
de los escritores en particular, sobre todo los de la provincia de Castellón, a
través de la iniciativa que promovió hace unos meses junto con otros escritores
para constituir la AEPC (Asociación de escritores de la provincia de Castellón)
que tan buenas experiencias nos está dando a todos.
Y es que os guste el género que os guste, podéis leer a José Manuel en
cualquiera de sus múltiples disciplinas literarias y descubriréis a un escritor
genuino, con oficio, con seriedad y compromiso, como los escritores clásicos.
A continuación comparto con todos vosotros, lectores, un fragmento de
su primera novela titulada Larga tormenta de otoño.
Leedlo, merece la pena. Y para que conozcáis un poquito más a su autor,
una breve entrevista a continuación.
LARGA TORMENTA DE OTOÑO – primera página
Jacobo soñaba con acariciar cada mañana el rostro suave de Ana.
Era su primer pensamiento del día, el primer deseo que tenía nada más despertar
desde aquella tarde en el parque, cuando la tormenta descargó una gruesa lluvia
sobre su cabeza y tuvo que refugiarse en el
kiosco de la música. Llegó corriendo, empapado, y allí estaba Ana, en el
centro, marcando un área equidistante entre su cuerpo y la manta de agua que
caía afuera. A Jacobo le pareció una ninfa que le ofrecía refugio en medio de
aquella sonora tormenta otoñal. Era una mujer hermosa, con un traje de algodón
blanco de tirantes que dejaban al aire unos hombros delicadamente arropados por
una chaqueta de punto de color anaranjado, y un escote que insinuaba un pecho
generoso y firme. Su rostro, arropado por una suave media melena de cabello
oscuro, era de facciones ligeramente marcadas y a la vez delicadas. Y los ojos...
Dos perlas verdes de mar. Se enamoró de ella al instante, sin pensarlo, como si
un fogonazo de luz le hubiera cegado el pensamiento, y se quedó allí, quieto,
sin saber si a partir de ese momento era el dueño de su mente o si acababa de
traspasar su voluntad a aquella mujer que, en medio del círculo, le hacía señas
para que se arrimara más hacia donde estaba, lugar en el que se encontraría más
resguardado.
Según se acercaba como un autómata teledirigido por la voluntad de
la mano que lo llamaba pudo sentir la fragancia que exhalaba el cuerpo de la
mujer que acababa de cambiarle la vida. Al llegar a su altura se situó a su
lado balbuceando apenas alguna tontería sobre el tiempo, y se hizo el silencio
entre ambos. Fueron para él unos minutos angustiosos, ya que deseaba que
aquella tormenta fuera el diluvio universal, con sus cuarenta días y sus
cuarenta noches, para poder estar a su lado y retrasar el momento en el que
tuvieran que despedirse, momento a partir del cual se convertiría en un paria
buscándola por los rincones de la ciudad. Mientras tanto, la cortina de agua
empezaba a crear grandes charcos en el parque, y con cada trueno parecía se
resquebrajaba el cielo. Aquello no tenía pinta de amainar, y Jacobo, superando
su estado de ensimismamiento, se decidió a decir algo que a él le pareció
gracioso:
—De seguir así, tendremos que hacer noche.
ENTREVISTA SINGULAR
1.- Aunque ya eres un autor publicado, si te dieran
la posibilidad de publicar tu próxima novela con una de las grandes editoriales,
¿sobre qué tema te gustaría escribirla? Y ¿a qué no renunciarías nunca en aras
de la comercialidad a la que supuestamente pudiera dirigirte la editorial?
Cuando escribo una novela no me planteo si
es del agrado del mercado editorial o no. Quizá, porque escribo la novela que
me gustaría leer y en ello pongo mis esperanzas: que los lectores y yo entremos
en simbiosis literaria. Otra cosa es que alguna editorial se interese por lo
que he escrito. Eso es harina de otro costal, en el que entran muchos factores,
que los escritores no podemos controlar.
Es difícil decir si sería capaz de renunciar
a algún texto, por sugerencia de una editorial. La verdad es que nunca me he
encontrado en esa situación. En cualquier caso, pienso que una cosa es escribir
una novela y otra cosa es publicarla, porque creo que en el proceso de edición
tanto tiene que decir el escritor como el editor.
No me gustan los posicionamientos
maximalistas. ¿Cuántas buenas novelas se habrán quedado en el cajón del olvido,
porque el autor se ha negado a que le cambiaran una coma o el editor se ha
obcecado en convertir el texto en algo tan comercial, que perdiera su propia
esencia literaria?
2.- Imagino que como buen escritor que eres serás también
un gran lector, ¿en qué momento del día te gusta más leer?
Gran lector soy. No se puede escribir sin
afición a la literatura. Es como si a
alguien que le guste jugar al fútbol, dijera que no les gusta ver partidos. Lo
de buen escritor es subjetivo. Pero volviendo a la pregunta: soy lector de cama
o sofá; quiero decir, normalmente leo tumbado cuando tengo algún rato durante
el día o ya antes de acostarme.
3.- En breve comenzaré la lectura de Nunca
seremos los mismos, tu última novela publicada por Unaria y que espero
reseñar pronto en este mismo blog. Cuando escribes, ¿qué temas o situaciones te
inspiran? O sea, ¿Cómo te enfrentas al folio en blanco?
El acto de escribir una novela no viene,
generalmente, de un momento de inspiración. Más bien se debe a un proceso
mental en el que van madurando ideas, hasta que una de ellas emerge sobre las
otras. En mi caso, a veces, tardo varios años desde que empiezo a pensar una
novela y comienzo a escribirla. Una vez iniciada la escritura, voy dejando que
la novela se vaya desarrollando en función de cómo evoluciona. No soy escritor
de fichas ni perfiles de personajes ni escenarios predefinidos. Todo va
surgiendo poco a poco. Todo va creciendo y tomando forma en mi cabeza. Toda la
novela tiene que estar en mi cabeza.
En cuanto al folio en blanco, sólo hay una
manera de enfrentarse: sin miedo al vacío narrativo que se produce muchas
veces, y sin obsesionarse. Es cierto que la inspiración es mejor que venga
trabajando, pero si no viene, hay que desplegar mucho oficio y, en último
extremo, darse una vuelta.
4.- ¿Qué te acompaña cuando lees? ¿Y cuando
escribes?
Nada. Cuando leo, silencio. Cuando escribo,
silencio.
5.- Hoy en día el número de publicaciones es
enorme. Hay tal marasmo de novelas, libros de escritores noveles y ediciones
clásicas que es muy difícil filtrar y decidir qué es lo que leemos. En tu
caso, ¿qué es lo primero en lo que te fijas para decidir leer un libro?
Uff!! Tengo algunos escritores de cabecera:
Muñoz Molina, Almudena Grandes, Vázquez Montalbán…, muchos más que no voy a
listar ahora. De estos, suelo leer casi todo o que sacan. Después me dejo guiar
por recomendaciones de amigos, o, simplemente, voy a la librería y me doy una
vuelta a ver que encuentro. También me gusta leer a los escritores y escritoras
de Castellón. Leo bastante de lo que se escribe.
6.- Vivimos en el mundo de la hiperconexión.
¿Utilizas las redes sociales? Cuáles son las que te parecen más interesantes y
por qué.
Un escritor no tiene más remedio que estar
presente, de una manera u otra en las redes, sobre todo cuando no tienes una
editorial detrás que te hace todo el trabajo de promoción. Además creo que las
redes sociales nos facilitan mucho saber qué piensan nuestros lectores sobre lo
que escribimos. Hay una interconexión que es fantástica. Sin embargo, hay que
tener cuidado y utilizarlas en su justa medida, porque si no te acaban
absorbiendo y haciendo perder el tiempo.
Todas las redes sociales son interesantes,
depende el uso que hagas de ellas o lo que hallar en ese mundo tan vivo, para
lo bueno y para lo malo. Yo procuro tener una presencia moderada, porque,
pienso, que una exposición excesiva es contraproducente. Utilizo,
principalmente, facebook.
7.- ¿Eres escritor de día o de noche?
De día. La noche es para el relax o la
diversión.
8.- Aparte de la literatura, ¿qué otras artes te
gustan? Cuéntanos un poquito cuáles y por qué (si es que hay un porqué).
Si me preguntan qué artes me gustan como
creador, he de decir que, salvo para la literatura, soy un negado para el
resto. Como espectador, me gusta la fotografía, la pintura, el teatro, el cine
y la música, sin despreciar la arquitectura. Soy un poco picalotodo, porque me
habría gustado haber nacido en el siglo XV y ser un hombre renacentista,
abierto a la cultura, el arte y el conocimiento.
9.- Te pido ahora unas respuestas rápidas
a)
¿Nos recomiendas un libro?
Recomiendo
el que acabo de leer: “El lector de Julio Verne” de Almudena Grandes, publicado
por Tusquets, dentro de la serie de la autora Episodios de una Guerra
Interminable. Es un libro brutal, que os relata cómo era la vida en aquella
España en la que la guerra no acabó en 1939, y siguió sembrando muerte
represión por muchas sierras del país. Concretamente, en este caso, en la
Sierra Sur de Jaén. Y lo más brutal es que todo está contado por un niño de 10
años, hijo de guardia civil, que vive en el cuartel. Tengo que decir, que me ha
impresionado bastante.
b)
Un personaje literario que sea inspirador para ti.
No
tengo uno definido. Cada personaje es parte de un mundo literario y ahí deben
seguir. Si hubiese alguno que me inspirara, estaría escribiendo gracias a la inventiva
de otro.
c)
¿Qué género literario te apasiona más?
La
novela, en general. Cualquier novela, sea del subgénero que sea, si está bien
escrita puede ser apasionante. También me interesa el ensayo, pero en otra
dimensión.
d)
¿Eres de radio o de televisión?
Más
de radio, que de televisión
e)
¿Mar o montaña?
Montaña
f)
La última cosa que te haya sorprendido tanto que todavía la recuerdes.
Mi
capacidad de sorpresa, cada vez es menor. Una lástima.
g)
Una canción o cantante que tenga para ti un significado singular.
Esta
es una pregunta que nunca sé responder. Me gusta la música y me gustan muchos
cantantes, de diferentes palos. Quizá, si tuviera que quedarme con alguno, por
llevar con él desde que era un chiquillo, me quedaría con Serrat.
10.- Me gustaría que definieras una escena lo más
cercana posible a tu felicidad.
Lo más cercano posible a mi felicidad es que
mi familia y mis amigos, sean felices y que nadie tenga dolor, porque el dolor
es invalidante y nos reduce a la nada.
11.- Eres un autor comprometido con el colectivo de
escritores de Castellón e impulsaste recientemente la creación de la Asociación de escritores de Castellón
(AEPC) junto con otros escritores de la provincia. ¿Qué acciones crees que
debería llevar a cabo la administración para potenciar / apoyar a este
colectivo? Y ¿cuáles son los próximos proyectos de la AEPC?
La literatura es bien cultural que traspasa
las berreras del arte, porque atesora en su seno todo el conocimiento que la
humanidad ha sido capaz de desarrollar a lo largo de su historia. Sólo por
esto, las administraciones deberían tener una atención máxima hacia la creación
literaria y hacia el fomento de la lectura. Se me ocurren muchas cosas que
pueden hacer las administraciones, y lo peor de todo, es que ellas saben lo que
tienen que hacer, pero no hacen.
En nuestro caso concreto, vamos a firmar el
segundo convenio con la Diputación de Castellón, que tiene como objetivo
impulsar la creación literaria entre los escritores y escritoras de Castellón,
este año mediante la convocatoria de un premio de novela; y el fomento de la
escritura entre los jóvenes, mediante un concurso de relatos de extensión
provincial.
Vamos cumpliendo objetivos y, para ello, es
posible que este 2018 pongamos en marcha una página web, con el fin de abrir un
portal para la promoción de los escritores miembros de la AEPC y su literatura.
12.- Y para terminar, ¿Cómo valorarías la producción
literaria de la provincia de Castellón?
Muy buena. Castellón está viviendo una época
literaria de oro, con buenísimos escritores y escritoras. Sólo hace falta, que
desde las instituciones se potencie que se lea la literatura que aquí se está
escribiendo.