El Yacimiento - mi crónica de lectura

Descubrí esta novela por pura casualidad mientras deambulaba por los pasillos de la biblioteca Rafalafena de Castellón y me llamó la atención tanto su título como la imagen de la portada y el hecho de estar ambientada en Afganistán.

Comencé a leerla y me enganché de inmediato porque El Yacimiento tiene todos los elementos clásicos de una novela de aventuras: Un trasfondo histórico en una zona que fue origen de civilizaciones, Afganistán, dos reporteros documentalistas de los de casta, de esos que no le hacen ascos a ningún escenario, que se arriesgan y que apuestan por la autenticidad, grandes intereses económicos y políticos más o menos ocultos y proyectos de alta tecnología que seguramente están realmente desarrollados pero no son todavía presentables ante el gran público.

Luis Montero Manglano, su autor me ha sorprendido gratamente con esta, mi primera lectura de una novela suya. Ha escrito un auténtico thriller cargado de acción, de intrigas económicas de altos intereses entre economías mundiales, con un toque humano muy personal a través de la historia de Suren, su protagonista de origen iraní y del enfoque crítico hacia la explotación de una mina de litio que el gobierno chino ha conseguido en una negociación sin límites de moral pero también sin prejuicios con el régimen talibán afgano con el que, por cierto, pronto la Unión Europea y otras economías occidentales se sentarán a negociar muchos temas de tú a tú olvidando todo lo que ello implicará para los derechos humanos.

El ritmo narrativo es trepidante. Transcurre en escenarios distintos que van alternándose para finalmente confluir en el mismo enclave de Tell Teba o también conocido como La Ruina de Alejandro (Magno) que esconde un ancestral poder misterioso y de origen desconocido, que nos transporta a las mejores novelas de misterio científico.

El misterio es mantenido en todo momento en un nivel muy alto de intensidad. La necesidad para el lector de conocer qué es lo que esconde ese valle misterioso, qué poder oculto aporta a quienes lo visitan, el por qué de las fluorescencias de los líquenes que cubren el valle, la desconexión general de todo aparato eléctrico que sucede sin explicación alguna y el descubrimiento de un cuaderno de bitácora de unos exploradores rusos que visitaron la zona muchos años atrás te invita a continuar leyendo para saber más y más del misterio.

El placer que he sentido con la lectura de esta novela es similar, imagino, al que han tenido tantos lectores cuando han leído por primera vez una gran novela de aventuras, como La isla del tesoro, o En busca del arca perdida: una mezcla perfecta de misterio, investigación, acción trepidante en un escenario histórico a punto de desaparecer por el capitalismo y la globalización más demoledora.

Doy un diez a esta novela. Me parece de lo mejor que he leído este año 2022.