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martes, 7 de diciembre de 2021

La sinfonía del tiempo - mi crónica de lectura

Tras meses arrinconada en la estantería de los libros adquiridos al comienzo de la pandemia, decidí empezar su lectura en noviembre y descubrí una completa experiencia histórica y novelesca. La sinfonía del tiempo es eso que a mí me gusta llamar una Gran Novela. He descubierto a este escritor, Álvaro Arbina en un momento mío de lector voraz y ha sido muy gratificante.

La sinfonía del tiempo me ha maravillado por varias razones: La primera es el viaje al desconocido (para mí) final del siglo XIX en España. La mayor parte de la trama transcurre entre 1883 y 1914, un período convulso en el que sucedió la guerra de Cuba, en la que la perdimos como colonia española. Fue también la posguerra de la última Guerra Carlista, una etapa muy agitada en el ámbito político. Supuso el comienzo del final de las colonizaciones europeas, el comienzo del declive del imperio británico, la construcción de la Tour Eiffel para la Exposición universal y el comienzo del desarrollo del tren y los medios de locomoción. Como digo, un período muy desconocido para mí de la historia que se me ha revelado muy interesante gracias a esta novela.

Pero la trama de La sinfonía del tiempo es mucho más compleja. Nos lleva desde Londres a Altzuri, pasando por París, Cuba, África o Bilbao. Aparecen los barcos que traficaban con esclavos, el mundo de la pintura impresionista, el comienzo de la técnica fotográfica, los misterios sobre los viajes en el tiempo, que es realmente el gran misterio de esta novela, las villas decimonónicas cargadas de rincones misteriosos y de historias no contadas. La pasión, el amor incondicional, el pasado que vuelve, el pasado no contado.

Hay también un elemento que a mí me gusta mucho en los libros, las cartas. Cartas que se envían y se leen como llave para explicar ciertos aspectos de la historia.

Álvaro Arbina me parece un escritor capaz, lleno de tesón y de perseverancia en tejer y retorcer una trama con múltiples ramificaciones que evoluciona en todo momento, que viaja en el tiempo y en el espacio, que trasciende las emociones y que te sumerge en una época muy interesante y te abstrae por completo del mundo actual.

Mi enhorabuena. La lectura de La sinfonía del tiempo ha supuesto una cápsula de aislamiento de los problemas y las vicisitudes actuales. Una burbuja de escape, como si yo mismo me hubiese convertido en un personaje de su novela.

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