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miércoles, 8 de septiembre de 2021

EL COVER - Una película necesaria

 

Empiezo esta crónica sobre la primera película dirigida por Secun de la Rosa, titulada El cover, diciendo que era una película necesaria.

Es, sin duda, una anomalía en la cinematografía española. En primer lugar, que un actor mayoritariamente y mal denominado “secundario” (que ya tiene tela para alguien llamado Secun) se lance a la dirección y consiga financiación para ello. Mas aún habiéndolo hecho en plena pandemia del COVID-19. Incluso más tratándose de un musical cantando en español y para rematar la faena, con una historia que transcurre en Benidorm.

No son mimbres fáciles para convencer a los productores a arriesgar su dinero, pero él, lo ha conseguido. Y cuando ves la película lo entiendes. Sólo hay una razón: su alma.

El cover destila humanismo, solidaridad, dignidad, arte y generosidad por los cuatro costados. Nos enseña una realidad que existe, que es mucho más afortunada de lo que a priori puede parecer y que estructura la vida de una ciudad cosmopolita como es Benidorm: la de los cantantes de versiones e imitadores que trabajan en la red de hoteles y locales de la ciudad.

En la película ya se explica muy bien, el hecho de que cada persona que se dedica a ello, con mayor o menor virtud musical, con mayor o menor acierto, es una pieza necesaria para la felicidad y el disfrute momentáneo del público que acude a verla, sin importarle la certidud o falsedad de su persona y su acercamiento al original.

Hay en el guión, escrito por Secun, una profundidad que invita a la reflexión, sobre la “apariencia y falsedad” de lo que sucede en Benidorm, lo refleja y explica muy bien su protagonista cuando dice, bastantes veces, que él no quiere ser Cover, que quiere ser simplemente camarero. Me parece muy inteligente la forma en que Secun de la Rosa lo ha explicado. Como decía al principio, ha derramado su alma en la de los artistas que aparecen.

El momento perfecto, la mejor escena de la película, para mí, es el duelo de canciones que tiene lugar en un garito llamado “Spanglish” donde bandas de jóvenes alternan canciones en inglés y en español. Supremo.

Estoy seguro de que la película habrá tenido muchos detractores. La habrán llamado pacata, horterada, españolada y otros adjetivos similares, que se lanzan gratuitamente sobre todo cuando se juzga a un musical como es esta película. ¡Cuánto tenemos que aprender de los anglosajones que siempre, siempre, ponen en valor sus historias!

Os recomiendo que vayáis, si es que todavía sigue en cartel, a ver El Cover (yo la he visto en Prime Video). Como decía antes, es una película necesaria, musicalmente preciosa, con un Juan Diego, una Carmen Machi y muchos actores especiales y afinados, con un protagonista que me ha sorprendido mucho, al que me he creído, con su “normalidad”, algo difícil hoy en día de defender.

Un aplauso a Secun de la Rosa por su arrojo, por su perseverancia y por su primer acierto como director.


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